jueves, 27 de julio de 2017

[PARTIDO ESTADOUNIDENSE DEL TRABAJO] El ascenso del neofascismo americano: Apuntes sobre la presidencia de Donald Trump.


El marxismo-leninismo define al fascismo como la abierta dictadura terrorista de los elementos más reaccionarios, más chovinistas y más imperialistas de la clase dominante ejercida a través de un partido político u organización fascista que tiene una base de masas.
- La era actual es uno de un debilitamiento del imperialismo de Estados Unidos, acuñado como está entre el social-imperialismo chino en ascenso y una menos poderosa pero importante imperialismo europeo. Por otra parte, bajo el impulso del deseo de los industriales de los Estados Unidos de subcontratar puestos de trabajo manufactureros en el extranjero debido a costos de mano de obra barata, sin querer han puesto la semilla de un auge manufacturero en muchas partes del mundo de otra manera subdesarrolladas. Éstos han desarrollado sus propias infraestructuras y ahora poseen un proletariado capacitado que está a punto de convertirse en un desafío creciente para la cuota de mercado de los Estados Unidos.


- Como explicó anteriormente el difunto marxista-leninista británico, Bill Bland mientras analizaba el capitalismo norteamericano en la era del asunto Watergate, el Partido Demócrata se había convertido en el representante del capital financiero, los llamados "capitalistas yanquis".
- El Partido Republicano se había convertido en el partido de las industrias avanzadas de la industria aeroespacial y tecnológica, y la industria petrolera - el llamado ala "cowboy" de los capitalistas.

- La Gran Recesión del siglo XXI es aquella en que el capital financiero creó un vórtice de deuda basado en ningún activo real producido por la clase obrera, conocido por Marx como "mítico" o "capital ficcional". De acuerdo con esto, sus representantes políticos Barack Obama y Hillary Clinton reforzó sus ganancias y le dio a Wall Street un nuevo contrato de arrendamiento. Ellos pretenden continuar este camino. El Partido Demócrata clavó al pseudo-socialista Bernie Sanders por sus intentos de plantear estas cuestiones. También han marginado a la capaz Elizabeth Warren por atreverse a no estar de acuerdo con la dinastía Clinton.

- El Partido Republicano no ha podido definir un camino claro hacia adelante. Están en una verdadera crisis, no sólo una representada como tal por la prensa burguesa.
- En primer lugar, el aumento dramático en el suministro de petróleo y los desafíos del petróleo líquido han sido un desafío para los beneficios y el poder de un tradicional farsante del Partido Republicano.

- A lo que se suma la industria de servicios de alta tecnología de esta época, a saber "Silicon Valley" y sus habitantes, han sido hasta ahora alimentados por la inmigración laboral intelectual de ultramar, especialmente de la India y China. Pero cada vez más este sector ha sido atacado por E.U. Desafíos y conflictos laborales en China, donde gran parte de sus productos se fabrican en los campos de trabajo de Guangzhou y Shenzen, etc. Finalmente, los recientes ataques del FBI pueden ser vistos como un intento de los capitalistas financieros de minar a los capitalistas del Valle del Silicio.

- En esta situación, las dificultades del Estado capitalista se ven agravadas por un aumento de la tasa de desempleo, un movimiento hacia la disminución de los salarios reales y el movimiento desde abajo para elevar el salario mínimo.
- Todo esto ha creado una enorme presión sobre el Partido Republicano. De ahí el surgimiento del "Tea Party", que representaba a los pequeñoburgueses inquietos ya los elementos de la clase obrera blanca desamparada. Pero el "Tea Party" no fue capaz de reunir un partido de masas o ganar apoyo masivo. Por lo tanto, el ascenso de Donald Trump.

- Donald Trump representa los intereses del ala más reaccionaria de la burguesía monopolista, con el apoyo de la pequeña burguesía y los pequeños productores, y tratando de construir un movimiento de masas penetrando en la clase obrera en la medida de lo posible sobre la base de la demagogia y el derecho populista. 

- La riqueza de Trump se basa principalmente en el mercado inmobiliario y las industrias de servicios, a través del conglomerado multinacional conocido como la Organización Trump.
- Una dictadura fascista hace uso de una base social organizada, particularmente entre la pequeña burguesía. El fascismo busca construir su base de masas principalmente entre la pequeña burguesía y el lumpenproletariado, pero también busca extender su influencia en la medida en que sea posible a la clase obrera ya sus organizaciones.


- Miremos los hechos a la vista: la campaña de Trump fue de carácter neofascista, adaptada a las condiciones del capitalismo monopolista estadounidense.
- Es una falacia pensar que un movimiento fascista sólo surge en respuesta a un movimiento obrero de masas. Los fascistas italianos ya habían destrozado a Gramsci y al movimiento obrero cuando se lanzó. De manera similar, en los Estados Unidos no existe un movimiento de clase obrera real.


- El objetivo del giro hacia el fascismo no es aplastar a la clase obrera organizada, sino evitar que se desarrolle.
- El fascismo ha tomado muchas formas históricamente dependientes de las condiciones materiales específicas en la nación en la que se manifiesta. Siendo abiertamente antirracional, el fascismo en sus etapas iniciales es más una colección de actitudes formadas por una perspectiva particular del mundo que un movimiento coherente o partido organizado. La ideología fascista pertenece a sentimientos reaccionarios y radicalmente derechistas que son amorfos por su propia naturaleza. La campaña Trump representaba un movimiento proto-fascista que se desarrollaba rápidamente en la dirección del fascismo total, adquiriendo cada vez más las características de un movimiento fascista, aunque los detalles de su programa estuvieran cambiando constantemente, llenos de inconsistencias y descaradamente oportunistas. Este oportunismo es típico de los movimientos fascistas.

- Signos de esto incluyen sus repetidas promesas de "restaurar la grandeza americana", hablar de declive nacional y agresiva política exterior, retórica abusivamente racista y extremista apelando a los peores temores y prejuicios de los votantes, actitudes abiertamente chauvinistas hacia las mujeres y demagógicas "anticapitalistas.” El multimillonario xenófobo y rabioso, Trump, hizo de la movilización masiva su principal objetivo, instando a sus seguidores a culpar a los inmigrantes mexicanos y musulmanes de sus problemas económicos, explotando los estereotipos étnicos y el miedo a los extranjeros. El amenazó con prohibir la inmigración musulmana, colocar a los musulmanes en un registro nacional y asesinar a los familiares de los “terroristas,” incluso mientras prestaba servicios religiosos al "anticapitalismo" pseudo-radical, atacando a Wall Street por arruinar la economía y hacer títeres de los principales políticos . Trump también condonó abiertamente y alentó la violencia en sus manifestaciones, y un cuerpo paramilitar que se llamaba a sí mismo la "Guardia del León" se formó a su alrededor.
El ascenso de Donald Trump a la presidencia de Estados Unidos representa un desastre sin precedentes para los pueblos trabajadores de los Estados Unidos y las clases trabajadoras del mundo entero. La elección de un neofascista. En pocas palabras, la elección de Donald Trump representa un movimiento neofascista adaptado a las condiciones de los Estados Unidos, liderado por un demagogo de "alt-right", poniendo un nuevo rostro a la política fascista.
Trump no es ideológicamente un fascista hitleriano, sino una versión americanizada del fascismo, similar a otros gobernantes fascistas que no estaban aliados con las potencias del Eje. Esto no quiere decir que debemos relajar la guardia por un instante, ya que está sentando las bases para que los Estados Unidos marche, de paso a paso, hacia una dictadura fascista
Aunque han habido algunos cambios de personal, un análisis del gabinete inicial de Trump es util: Jeff Sessions (Fiscal General), asociaciado de nacionalistas blancos y oponente a la ciudadanía para inmigrantes, denunciado por Coretta Scott King por ser racista, amante de la CIA y la vigilancia masiva. Wilbur Ross (Secretario de Comercio) multimillonario monopolista y Trump donante quien fue por fallas de seguridad después de una explosión mató a 12 trabajadores en una mina de carbón 
propiedad de su compañía, Ben Carson (Secretario de Vivienda y Desarrollo Urbano) cirujano jubilado que admite que no es competente para desempeñar esa función , James Mattis (Secretario de Defensa), un miliarista extremista retirado de su mando militar en 2013 por su conducta de línea dura, Ryan Zinke (Secretario del Interior) congresista de primero año con un récord anti-medio, Rex Tillerson (Secretario de Estado) Ejecutivo de ExxonMobil sin experiencia en el sector público, Steve Mnuchin (Secretario del Tesoro) Gerente de fondos y uno de los principales arquitectos de la crisis financiera, quien se convirtió en infame por las crueles practices hipotecarias de su banco, Elain Chao (Secretario de Transporte) Ex jefe del Departamento de Trabajo de la Administración Bush, que fue investigado y que regularmente no protege los derechos de los trabajadores de bajo salario, Andy Puzder (Secretario de Trabajo) Un ejecutivo de la industria de comida rápida que se opone a los aumentos de salario mínimo y a las protecciones de los trabajadores; Uno señaló que las máquinas no necesitan días libres, días de enfermedad o permiso de maternidad y no entablan juicios. Tom Price (Secretario de Salud y Servicios Humanos) es un firme opositor a los derechos de las mujeres y el acceso a la anticoncepción, quien apoya los recortes a Medicare y Medicaid, Scott Pruit (Administrador de la EPA), ex procurador general de Oklahoma quien niega el cambio climático, que demandó a la EPA Para revertir sus esfuerzos por agua limpia y aire limpio. Stephen Bannon (Estratega Principal) alt-right ex-banquero y autoproclamado supremacista blanco, ex director ejecutivo editor de la editorial extrema derecha Breitbart News.
Este "alt-right", como los nacionalsocialistas historicos, se presentan como revolucionarios mientras representan el militarismo, el fascismo, el racismo, el chovinismo y representan claramente las partes más reaccionarias del capital monopolista. La clase dominante ha hecho la paz con éllos, los liberales se marchitaron al verlos y no han presentado ninguna resistencia seria.
La crisis económica, el agravamiento de la lucha de clases, y la intensificación de la agresión del imperialismo son el resultado. Intentos de prohibir la inmigración musulmana, incluida la prohibición inmigrantes de Siria, la legislación anti-protesta, la falta de financiación de las artes, la retorcencia de los medios de comunicación, la reactivación del oleoducto Dakota Access, recientemente amenazando la guerra contra México, Corea del Norte e Irán.
No es sólo una cuestión de necesidad histórica; No es una cuestión de sobrevivencia. Estamos en la situación más oscura de los Estados Unidos en décadas, posiblemente en un siglo. La marca de Trump de ultra-nacionalismo atávico e imprudente estadounidense sólo puede ser derrotada a través de una acción de masas militante y organizada. Armados con un claro análisis de la situación, las organizaciones revolucionarias, progresistas y de masas deben prepararse para una lucha prolongada e intensificada.
La amenaza está definida. Las líneas de batalla han sido dibujadas. La historia no será negada. La tumba del fascismo debe ver y verá el nacimiento del socialismo. Así ha sido. Así será de nuevo. 

[Movimiento 26 de Abril/ Puerto Rico] PRIMERA REVOLUCIÓN SOCIALISTA VICTORIOSA: A 100 AÑOS DE LA REVOLUCIÓN DE OCTUBRE DEL 1917

Una vez más les damos las gracias a los compañeros del PCMLE y de la JRE por invitarnos a participar en el 21 Seminario Internacional “Problemas de la Revolución en América Latina”. Y un fraternal saludo a todos los compañeros y compañeras internacionales que hoy nos hemos dado cita en este evento que año tras año se viene desarrollando en Quito, Ecuador. Compañeros y compañerasEl 25 de octubre de 1917, o el 7 de noviembre según el calendario gregoriano, el líder indiscutible del Partido Bolchevique, Vladimir Ilich Ulianov Lenin, dirigió la insurrección en la entonces capital de Rusia, Petrogrado, contra el gobierno provisional de Alessandre Kerensky. La Guardia Roja, dirigida por bolcheviques, lanzó un dramático y bien organizado asalto final sobre el palacio de invierno en las noches del 7 y 8 de noviembre. La Unión Soviética, nacida de ese acto revolucionario, honró esa fecha proclamando el 7 de noviembre como día oficial de la revolución y día de fiesta nacional. Este fue uno de los más grandes acontecimientos políticos del siglo XX, en la lucha del proletariado por el socialismo. LA REVOLUCIÓN DE OCTUBRE SIGNIFICÓ LA QUIEBRA DEL FRENTE DEL IMPERIALISMO MUNDIAL, LA ELIMINACIÓN DE LA BURGUESÍA IMPERIALISTA, EN UNO DE LOS MAYORES PAÍSES CAPITALISTAS DEL MUNDO Y LA LLEGADA AL PODER deL PROLETARIADO. LA REVOLUCIÓN DE OCTUBRE FUE EL PRELUDIO DE LA REVOLUCIÓN INTERNACIONAL CONTRA EL CAPITALISMO Y EL IMPERIALISMO Y EL MODELO PARA LOS PARTIDOS COMUNISTAS Y OBREROS DEL MUNDO. Gesta heroica que marcó y dejó establecido firmemente, el rompimiento con la burguesía y la activa participación del proletariado, lo que marcó un hito tan importante en la historia de la humanidad, que jamás podrá ser olvidado. Por eso hoy lo recordamos y lo tenemos siempre en mente durante el transcurso de nuestro diario batallar.
La primera revolución socialista comenzó durante unos conflictos existentes entre dos grupos imperialistas: el anglo francés y el austro-alemán. El Camarada Lenin se percató de que, por estar enfrascados en su conflicto, no tendrían tiempo ni recursos bélicos para frenar la Revolución de Octubre. Así logró su revolución, aún con una sociedad campesina que no había pasado por una sociedad burguesa. Fue una revolución dirigida a obstaculizar la posibilidad del capitalismo y a combatir a los zares rusos. La Rusia del 1917, era una sociedad arcaica compuesta por un 80% de campesinos y escaso proletariado. Lenin muy pronto pudo captar la necesidad de incluir al campesinado para mantener a flote la revolución, pues ésta se estaba gestando y agudizando en un país no industrializado. Lenin, conocía la sociedad que deseaba cambiar y era un estudioso del Marxismo cuyo conocimiento le ayudó a entender que el camino a seguir era la construcción del socialismo, aunque al principio fuera en un solo país, la Unión Soviética sin mucha ayuda del exterior y por su propio esfuerzo. Aún con los problemas que irían surgiendo, entendía que se estaban dando las condiciones para lograr llevar a la victoria la gran revolución socialista aun en un país tan atrasado como lo era Rusia.
El movimiento bolchevique dirigido por Vladimir Ilich Ulianov Lenin, no fue un movimiento homogéneo, uniforme. Había tendencias diferentes e incompatibles aunque en un inicio tenían aparentemente un mismo discurso ideológico-político. En aquel momento el Partido Socialista Revolucionario que contaba con el apoyo de la mayoría de los campesinos y, alegadamente, defendía la nacionalización de la tierra, fue incapaz de entender cuán importante y necesario era para los campesinos rusos la nacionalización de los grandes latifundios. Como los del Partido Socialista Revolucionario no le hicieron caso, los campesinos le retiraron unánimemente su apoyo. De inmediato apoyaron a los Bolcheviques, los cuales aprobaron y promulgaron un Decreto Sobre la Tierra, al otro día de tomar el poder con la participación de asociaciones profesionales tales como escritores, pintores, arquitectos, sindicatos y otros, en la administración del Estado. CUMPLIR LO QUE SE PROMETE, ésta fue una de las primeras enseñanzas de la revolución Bolchevique de octubre del 1917 la cual fue apoyada por la gran mayoría del pueblo.
Aun así, pasado el tiempo, los mencheviques, al no tener capacidad o interés para comprender el proceso revolucionario que estaba en marcha, comenzaron a descalificar a los revolucionarios tildando el proceso como deformación de la revolución, de revolución traicionada, de reformismo. Estos conceptos fueron asumidos después de forma acrítica por la sovietología occidental burguesa, sectores de la izquierda reformista y los gobiernos rusos después de Stalin, para echar leña sobre la Revolución de Octubre. Unos lo hacían perversa y maliciosamente y otros porque nunca entendieron y continúan sin entender la magnitud de los acontecimientos. Es lamentable que aún hoy muchos, compañeros y compañeras de izquierda, no conozcan nada sobre esta hazaña y mucho menos tengan la capacidad de deslindar sus preferencias ideológicas y políticas del examen objetivo de la sociedad soviética, por el sólo hecho de asociarlo con el comunismo. Compañeras y compañeros, es necesario para poder construir el socialismo y llegar al comunismo, conocer la evolución histórica, no solo de nuestra sociedad, sino también de la soviética, su evolución histórica y sus desaciertos y errores cometidos por todos los que han gobernado, después de la muerte del camarada Stalin. Debemos realizar un balance crítico necesario a ese legado que nos dejó la Revolución de Octubre. Más aún hoy, que nos enfrentamos a un presidente como DONALD TRUMP, un verdadero desquiciado mental que nos puede llevar a un desastre bélico. También nos enfrentamos a otras tantas mentes colonizadas, reformistas y oportunistas traidoras, que sueñan con la conciliación de las contradicciones, olvidando la dialéctica materialista. Así terminan jugando dentro del marco que permitan el imperio invasor y la burguesía capitalista e imperialista. Son los que se han montado en el último vagón del tren luego de la “caída de los muros”.
Yo vengo de Puerto Rico, colonia estadounidense por 119 años. En Puerto Rico esas mentes reformistas y colonizadas, exigen una supuesta nueva civilización, un nuevo ente social, un olvido de nuestras culturas y tradiciones una norteamericanización de todo el Caribe y Latinoamérica. En nuestro Puerto Rico, la teoría marxista y la causa del socialismo perdieron arraigo en muchos sectores intelectuales, sindicales y en gran parte de la juventud. Fue tal el tsunami, que se llevó por delante a líderes independentistas que “eran marxistas”. Muchos de estos comenzaron a alejarse de la literatura marxista, Engels, leninista y maoísta para la última década del siglo XX e inicio del XXI. Recuerdo frases como es el fin del marxismo, del socialismo y de la lucha de clases. Llegaron a lo irracional de comentar que el capitalismo llegó para quedarse.
Estas actitudes posmodernistas hacen más difícil la resistencia del pueblo al imperialismo y al capitalismo. Sin embargo, el pueblo continúa día a día su lucha heroica. Esto ha llevado al desarrollo de una conciencia nacional, a una moral y un espíritu de valor y sacrificio que cada día se manifiesta más sin importar las consecuencias. Puerto Rico resiste y lucha. En estos momentos, cuando se ha establecido un gobierno dictatorial enviado por el congreso estadounidense con el pretexto de cobrar la inmensa y odiosa deuda externa, el pueblo ha establecido diversos frentes de lucha y se organiza para la resistencia y el combate. Nunca como ahora, Puerto Rico ha necesitado de la solidaridad de los pueblos hermanos. Al conmemorar los 100 años de la gloriosa Revolución de Octubre, nada mejor que exhibir el espíritu internacionalista solidarizándonos con esa lucha valiente, centenaria, y, casi siempre solitaria, del pueblo de Puerto Rico.
Compañeras y compañeros termino mi exposición haciendo un llamado a la unidad y firmeza de las organizaciones que luchamos contra el imperialismo, por una sociedad donde las relaciones humanas, tanto internas como internacionales, sean de colaboración, no de explotación, una sociedad socialista-comunista donde no exista la división de clases y que esté basada en una unidad de las concepciones ideológico–políticas fundamentales.

LA UNIDAD DE LAS CONCEPCIONES Y MÉTODOS DE LUCHA ES LA BASE DE LA DISCIPLINA Y LA ACTUACIÓN UNITARIA DE UN MOVIMIENTO DE LIBERACIÓN NACIONAL, SIN EXCLUIR LA POSIBILIDAD DE APERTURAS A OTRAS FUERZAS REVOLUCIONARIAS, PUES, HACERLO, SERÍA ANTIDIALÉCTICO Y SECTARIO. ESTAS FUERZAS PUEDEN SER INCLUÍDAS GRADUALMENTE EN TAREAS CONJUNTAS Y EN LAS DISCUSIONES IDEOLÓGICAS POLÍTICAS, PARA LOGRAR UN OBJETIVO ESTRATÉGICO COMÚN. 

¡QUE VIVA PUERTO RICO LIBRE, SOBERANO Y SOCIALISTA! ¡QUÉ VIVA LA UNIDAD DE LOS PUEBLOS DEL MUNDO! ¡QUÉ VIVA EL INTERNACIONALISMO PROLETARIO!

Muchas gracias por su paciencia.
Norberto A. Cintrón Fiallo Porta voz Movimiento 26 de Abril 26 de julio 2017 Quito-Ecuador 

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[PCMLE / Ecuador] “La Revolución Socialista de Octubre y sus lecciones para la lucha actual de los trabajadores y los pueblos”


Por decisión tomada entre el PCMLE y la JRE, acogiendo el llamamiento de la Conferencia Internacional de Partidos y Organizaciones Marxistas Leninistas, CIPOML, para que en las distintas regiones del mundo se celebre el Centenario de la Revolución de Octubre con diversas actividades, hemos situado como tema central del presente Seminario esta gran gesta de los trabajadores, los campesinos y los pueblos de Rusia.
En efecto, en diversos continentes se vienen organizando seminarios, mítines, reuniones internacionalistas, publicaciones, asambleas y concentraciones, que muestran el hecho de que los comunistas, la izquierda, la clase obrera y otros sectores democráticos, conmemoramos esta gran fecha, debatimos la trascendencia del acontecimiento histórico, extraemos valiosas lecciones del mismo y todo eso nos muestra que las aspiraciones del cambio social, de libertad, del fin de la explotación y la injusticia, la superación del sistema capitalista se hallan presentes en la conciencia de apreciables sectores de los trabajadores, de las personas democráticas que aspiran la justicia social. Estos valores se mantienen pese a la feroz ofensiva anticomunista que los círculos imperialistas y sus gobiernos llevan adelante en contra de los pueblos.
 
Significación del “Octubre Rojo”
La Revolución Socialista de Octubre constituye un hecho de gran trascendencia histórica; sin duda uno de los acontecimientos más importantes del siglo XX, quizá el más importante, no solo para Rusia, sino a nivel internacional, ya que a partir de su realización, se produjo por primera vez el derrocamiento de la burguesía por parte de los trabajadores en sólida alianza con el campesinado pobre y otros sectores populares, en el más grande país de la tierra, con más de 150 millones de habitantes y uno de los atrasados en el desarrollo capitalista.
Con esta victoria de los oprimidos y explotados, el mundo entró a una nueva época histórica: la del imperialismo y las revoluciones proletarias, pues mostró a la Humanidad que era posible dejar atrás el capitalismo a través del cambio revolucionario, y en su reemplazo, edificar un nuevo sistema económico, social y político, de trabajo, justicia y bienestar, el socialismo. Abrió desde entonces esa perspectiva promisoria para los proletarios del mundo, para los pobres de la tierra.
 
Los eslabones débiles de la dominación imperialista
La revolución rusa desarrollada en diversas etapas, desde 1905, hasta la revolución democrática de Febrero de 1917, y de allí a Octubre de ese mismo año, la revolución socialista, principalmente, cumplió un papel de singular importancia para los trabajadores y los pueblos, las naciones y las nacionalidades de ese inmenso país; rompió por vía insurreccional y de masas, el frente del imperialismo, de la explotación y opresión a nivel mundial, demostrando en la práctica una de las importantes tesis del marxismo leninismo, la existencia de eslabones débiles en el sistema de dominación reaccionaria; determinados países y regiones donde convergen una serie de condiciones geográficas, económicas y políticas, donde se producen a la vez, momentos importantes y particulares que tornan sumamente vulnerables los mecanismos de la dependencia. Países y lugares donde se puede aprovechar por parte de las fuerzas revolucionarias, esa transitoria debilidad de las naciones capitalistas dominantes para levantar la lucha por la toma del poder.
Justamente, ese fue el momento que los bolcheviques rusos aprovecharon esas condiciones, en el curso de la Primera Guerra Mundial, cuando los dos principales bloques imperialistas: la Entente (Alemania, Austro – Hungría e Italia, inicialmente) y la Triple Alianza (Inglaterra, Francia y Rusia) se enfrentaron a muerte por sus intereses geopolíticos lo que provocó, inicialmente al menos, que las potencias no pudieran emplearse a fondo para combatir a la revolución que correctamente levantó las banderas de la paz, el pan y la tierra.
Esos anhelos fervientes de los trabajadores, los campesinos y los pueblos, fueron decisivos para ganarlos al campo revolucionario, al igual que las tropas que se hallaban extenuadas por la guerra y que se vieron llevadas a la lucha como el único medio para salir de esa conflagración.
 
La revolución socialista una revolución distinta
La Revolución de Octubre significa una revolución distinta a las anteriores producidas en el devenir de la historia. Las anteriores revoluciones como la rebelión de los esclavos o los siervos de la gleba, las revoluciones burguesas de Inglaterra, Francia o las rebeliones campesinas de Alemania, por su propia naturaleza alcanzaron el relevo o el cambio en el poder de una clase social poseedora, propietaria, por otra que le sucedió en el dominio de Estado.
La revolución social deL proletariado, así mismo, por la propia naturaleza de sus actores se propuso y lo consiguió, la supresión de todos y cada uno de los grupos de explotadores, la supresión de la explotación del hombre por el hombre, la instauración del Poder en las manos de los trabajadores, la plasmación en los hechos de la dictadura del proletariado.
 
El nuevo poder revolucionario
Una de las significativas contribuciones de la Revolución de Octubre en Rusia es que instauró en la práctica la esencial teoría marxista leninista de la dictadura del proletariado, como la forma de Estado de transición del capitalismo al socialismo. Desde que Carlos Marx fundamentara que el Estado no es sino un órgano de dominación y opresión de una clase por otra y que no era posible la liberación de la clase oprimida sin liquidar ese instrumento de dominación que había sido utilizado por las clases explotadoras para mantener su dominio, la experiencia de la Comuna de París de 1871 y definitivamente la Revolución Bolchevique, fundó la República de los Sóviets (Consejos) de obreros, campesinos y soldados, como un Poder nuevo donde se expresaba la dictadura del proletariado.
V. I. Lenin fue muy claro en advertir que solo puede considerarse un marxista, un revolucionario proletario, aquél que hiciera extensiva la cuestión de la lucha de clases al reconocimiento de la vigencia de la dictadura del proletariado.
La dictadura del proletariado es entendida como una alianza entre los proletarios, los trabajadores, las masas trabajadoras del campo, dirigida contra el capital, contra la burguesía; alianza que tiene como fin la instauración y consolidación definitiva del socialismo. Una dictadura dirigida contra los explotadores que han sido derrocados del poder, pero una democracia de modo nuevo para las mayorías. La Revolución de Octubre es la aplicación práctica de la teoría marxista leninista de la dictadura del proletariado y mientras sus principios estuvieron vigentes se demostró efectivamente como un poder político de nuevo tipo al servicio de los trabajadores y los pueblos.
 
La “expropiación de los expropiadores”
Por vía revolucionaria, utilizando la insurrección armada, la violencia revolucionaria, los trabajadores en Rusia “expropiaron a los expropiadores” de los principales medios de producción de los que disfrutaban a expensas del esfuerzo y el sudor, de la explotación inmisericorde de las masas trabajadoras, la decadente nobleza zarista, los terratenientes y grandes burgueses de ese inmenso país. La revolución convirtió esa gran propiedad privada de una minoría privilegiada en propiedad colectiva, de la sociedad misma, para beneficio de las mayorías, terminando así la odiosa diferenciación social, la explotación del hombre por el hombre.
 
Derrumbe de la opresión nacional
El oprobioso régimen de la autocracia encabezada por el zar (“gran rey”), que representaba y defendía a una rancia nobleza, así como los intereses de los terratenientes feudales y de la burguesía, había convertido a Rusia en una “cárcel de pueblos”. Oprimía cruel y violentamente a las nacionalidades y pueblos como Armenia, el Turkestán, Ucrania, Azerbazhdian, que el régimen reaccionario ubicaba en la periferia del imperio a través de la discriminación étnica, los prejuicios religiosos, la xenofobia y el chovinismo de la “gran Rusia”. Solo la Revolución, a través de sus avanzadas y claras posiciones sobre el movimiento nacional, permitió que los pueblos, naciones y nacionalidades de Rusia encontraran en el llamamiento y organización de los bolcheviques, las motivaciones profundas para su propia liberación. Esto significó un gran aporte para el movimiento de independencia de las colonias, semi colonias y países dependientes a nivel mundial, puesto que después de la conquista del poder por parte del proletariado en Rusia, encontró una poderosa guía y ejemplo en su lucha emancipadora en contra de las metrópolis imperialistas.
 
El rol histórico del proletariado
La revolución rusa tiene una gran significación internacional puesto que erigió de manera categórica a los proletarios, a los trabajadores, como una clase social en el poder, y mostró que esa clase como producto genuino del capitalismo, estaba llamada a cumplir el papel de vanguardia revolucionaria de las otras clases sociales oprimidas, de fuerza social que habría de jugar el papel dirigente en las transformación social, y que ésta para ser auténtica, habría de producirse por la vía revolucionaria, insurreccional, proclamando a todos, que solo la revolución es cambio.
La clase obrera rusa, sin embargo de no ser una clase mayoritaria entre la población del país tenía a su haber una rica experiencia acumulada en sus luchas reivindicativas y políticas, en sus huelgas parciales y generales, en sus reñidos combates contra la voraz explotación de las empresas de capital francés, inglés y específicamente ruso. Empresas capitalistas que se formaron teniendo al régimen zarista como sustento y al imperialismo como garantía para establecerse y desarrollarse en ese país. Los obreros rusos habían ganado una importante experiencia en las masivas jornadas de combate que precedieron a 1905, en la lucha contra el zarismo y la explotación capitalista; habían fundado desde esa época los sóviets (Consejos) de obreros, campesinos, desde un inicio para enfrentar la lucha cotidiana, las exigencias y reivindicaciones, que se fueron convirtiendo hasta 1917 en un importante soporte de la organización y expresión política de los trabajadores y luego del triunfo revolucionario en el puntal más robusto de la construcción socialista, de la que emanaba el poder político proletario. 
Por entonces, más allá de las fronteras de Rusia, se desenvolvía un poderoso movimiento obrero en Europa que enfrentaba con lucha la dura crisis originada en la guerra imperialista, maduraba en Occidente y el Oriente despertaba con la lucha de las colonias y semi colonias. Esto aseguró para la revolución, aliados fieles en su lucha contra el imperialismo mundial. La clase obrera rusa estaba jugando a nivel nacional su papel de sepulturera del capitalismo y se alimentaba del apoyo de los campesinos y soldados que aspiraban fervientemente la paz y la tierra. La lucha de los trabajadores a nivel internacional formaba parte de esos combativos afluentes necesarios para la toma y el sostenimiento del poder.
 
Un partido probado por su experiencia
No se podría hablar de Octubre de 1917 si no se habla del Partido de los bolcheviques rusos. Surgido en los albores del siglo pasado, asume de inicio el nombre de Partido Obrero Social Demócrata Ruso, POSDR que cumple una trayectoria apasionante en la que destacan una pléyade de dirigentes revolucionarios junto a las principales e indiscutidas figuras: V.I.Lenin y J.V. Stalin, que desarrollan de modo firme y consecuente, una intensa lucha de ideas y de acción política de gran trascendencia en las filas socialdemócratas y del movimiento revolucionario de la época para construir un partido caracterizado por ser una vanguardia consciente y de alto nivel de organización y disciplina, al servicio del proletariado. Una formación política que en un persistente proceso se construyó como el partido político de la clase obrera, lo más selecto de la clase, guía y dirigente de la revolución.
Las diversas clases, partidos y organizaciones existentes en el panorama ruso, efectivamente planteaban diversos puntos de vista sobre la realidad concreta y formulaban sus visiones y propuestas sobre lo que había que hacer y cómo enfrentar esos acuciantes problemas que se estaban viviendo. Es obvio, que cada una de esas formaciones partía, para sus opiniones y posiciones, de los intereses de las clases y sectores a quienes ideológica y políticamente se debían, por ejemplo los “eseristas” o socialistas revolucionarios, los reformistas (mencheviques y oportunistas), los liberales (kadetes) y el propio régimen zarista que manejaba la situación de acuerdo a sus intereses y designios para mantenerse en el poder y conservar sus privilegios.
En estas condiciones, sólo el Partido Bolchevique de Lenin, Stalin y otros dirigentes, pudo erigirse y ganar la confianza de la clase obrera, conseguir el apoyo firme de los campesinos pobres, de los pueblos y nacionalidades del imperio ruso para conducirlos a la denodada lucha para la conquista del poder.
 
Algunas lecciones que nos señala “Octubre”
Notables son las lecciones y enseñanzas que nos deja la Revolución de Octubre y que son de gran utilidad para el momento presente en que el imperialismo y el capitalismo siguen dominando en la palestra mundial; existen, para desgracia de la humanidad; sus monopolios que sobreexplotan a los trabajadores en los distintos ámbitos del planeta; oprimen de forma voraz a los países dependientes y atrasados; llevan adelante sus criminales designios de atraco, dominación y propician guerras y conflictos localizados para sacar ventaja de ellos; por sus intereses y contradicciones, ponen en vilo la paz mundial; pisotean agresivamente la independencia y soberanía de los países, naciones y pueblos; son los responsables de las oleadas de refugiados, de las migraciones, en las que se hacen tabla rasa los derechos y la dignidad humana.
 
Vigencia de la revolución social
Por estas razones, para cambiar y terminar esta dura situación, la única salida que está vigente y es viable para los trabajadores, la juventud, las mujeres y los pueblos sigue siendo la revolución. Para su organización, realización y su victoria, se deben tomar en cuenta los escenarios en que se desenvuelve la lucha de los trabajadores y los pueblos, el nivel de conciencia, organización y movilización de las masas trabajadoras; la situación en la que se halla el campo del enemigo en general y la perspectiva mediata e inmediata, económica, política y social de cada país; las circunstancias de orden interior y exterior y las particularidades diversas que se presentan.
La revolución en nuestros días tiene su vigencia en un país en donde se hallen presentes, en donde puedan generarse, condiciones específicas que permitan su realización. Como ayer y como hoy, no puede ser un óbice que la transformación social pueda producirse en un solo país, contando con un firme apoyo internacional de los trabajadores y los pueblos del mundo. La tesis sustentada por algunos sectores respecto de que la revolución solo puede realizarse en escala continental o regional, exclusivamente, no es resultado de la experiencia que hemos vivido en la realidad y pese a las derrotas sufridas por diversos factores, en algunos de los procesos revolucionarios, la verdad es que la lucha por la transformación social pudo levantarse en diversos países y en distintos momentos. Argelia, Cuba, China, Vietnam, son algunos de esos ejemplos.
 
El proceso revolucionario
Organizar y hacer la revolución debe ser entendido como un proceso que tiene un camino contradictorio; avances y retrocesos, victorias y derrotas, momentos de aceleración y reanimación; de dificultades y marchas forzadas, ardua y persistente acumulación de fuerzas, en que los actores de la revolución encabezados por la clase obrera y su partido sean capaces de arrostrar todas las batallas parciales y generales, los combates reivindicativos y políticos frente a las acciones que los enemigos de clase empujan en contra de los trabajadores de la ciudad y del campo, la juventud, las mujeres y los pueblos. Hay que insistir en la necesidad de siempre trabajar con la bandera de la unidad, para agrupar a todas las fuerzas interesadas en el cambio.
Necesitamos afirmar la concepción de que los pueblos hacen la historia, la revolución es la obra de las masas trabajadoras y ellas deben jugar un papel protagónico a condición de la conciencia y la disposición por el poder. Las masas necesitan de esa conciencia y el partido las hace conscientes; aprender a utilizar de acuerdo a las condiciones que se presentan, las diferentes formas de lucha y por vía insurreccional, por medio de la violencia revolucionaria, lanzarse en el momento más apropiado a la toma del poder como condición central e indispensable, para la edificación de la nueva sociedad, del socialismo.
 
Una ideología revolucionaria 
Es necesario inspirarse en una ideología, una doctrina revolucionaria que tenga un carácter objetivo, cuyos postulados estén en consonancia con las ciencias que señalan el curso de las sociedades desde su génesis y su desarrollo, que permita determinar los factores que mueven el desarrollo, las fuerzas interesadas en la lucha y la transformación social; la dirección que marca el rumbo de sus objetivos. En el caso de la Revolución de Octubre, ésta tuvo inspiración en la ciencia del materialismo histórico, del marxismo – leninismo, asimilada, sostenida, difundida y practicada por el partido bolchevique que en su camino adoptó el nombre correspondiente de Partido Comunista (bolchevique) de la URSS.
 
Una creativa, ágil y masiva propaganda
Una gran labor propagandística y de agitación fue organizada por el partido, las diversas organizaciones proletarias en el seno de las masas trabajadoras a partir de numerosos periódicos, boletines, obras de diversos autores, artículos, que jugaron un papel importante en la forja de la conciencia y disposición de lucha en las distintas jornadas durante el proceso revolucionario, propaganda que circuló en los centros fabriles, en el campo, en las universidades y liceos; en las huelgas, levantamientos y movilizaciones. La activa labor de propaganda y agitación de los bolcheviques en el seno de los sóviets, en las fábricas e incluso en las trincheras, durante la guerra, fue decisiva en el curso de la revolución.
 
La necesidad del partido comunista
Un partido guiado por esa ideología, con una persistente y consecuente práctica social, con una disciplina férrea y con marcado heroísmo, supo –en un proceso– ganarse el favor, la confianza y el respeto de las masas trabajadoras, de los campesinos y otros sectores sociales de los pueblos de Rusia, avanzando en la primera línea del combate, pero que a la vez supo replegarse con acierto en los momentos de reflujo revolucionario, que tuvo innúmeros cambios de táctica en los distintos momentos del proceso para preservar sus fuerzas, reorganizarse y avanzar a las nuevas batallas que demanda la emancipación. Ésta es una magistral lección para los revolucionarios de hoy en día. Hacer de nuestros partidos y organizaciones políticas verdaderos batallones de la lucha revolucionaria, que encabecen las banderas de unidad, disciplina y consecuencia con los elevados intereses de la emancipación.
 
Partido Comunista Marxista Leninista del Ecuador, PCMLE


[FEUE NACIONAL/ Ecuador] LOS APORTES DE LA REVOLUCIÓN DE OCTUBRE EN LA EDUCACIÓN SUPERIOR

INTRODUCCIÓN

La Revolución de Octubre constituye sin duda el hecho histórico más importante y trascendental de la historia de la humanidad. Para la juventud y en particular para el movimiento estudiantil universitario afirma la validez de la revolución y el socialismo y su rol en la consecución de estos objetivos.
Es el resultado de años de organización del Partido Bolchevique, de la maduración de las condiciones objetivas y subjetivas, de todo un movimiento revolucionario de masas que bajo la dirección de Partido y la contradicción entre las relaciones sociales de producción y el desarrollo que exigían las fuerzas productivas de la época, desembocó en el asalto al poder por parte de los trabajadores y el pueblo.

LA REVOLUCIÓN DE OCTUBRE Y SUS ENSEÑANZAS.
Para la FEUE NACIONAL la Revolución de Octubre es un acontecimiento histórico que transformó la sociedad y la educación superior. Al cumplir 100 años es más vigente que nunca, sus enseñanzas y logros son imprescindibles tomarlos en cuenta en el debate actual sobre la universidad y su concepción.
El Partido Bolchevique tenía claro que, para pasar al comunismo, además de las condiciones económicas, se requiere de un alto nivel de educación y conciencia de las masas; por otro lado, se debían satisfacer las necesidades materiales de la población Rusa, afectada por las guerras y la debacle productiva del anterior régimen, por lo que era menester formar a las masas en la tecnificación e industrialización del proceso productivo, tanto en el campo como en la ciudad.
Desde los inicios se creó el Narkompros (Comisariato Popular de la Educación) ente encargado de la educación pública que nacionalizó todas las instituciones educativas, decretando la separación Iglesia-Estado y la unificación del sistema escolar. Se propuso terminar con el analfabetismo, cambió el sistema curricular, apostando a las ciencias biológicas, químicas y astronómicas.
En 1919 el Partido planteó como tarea fundamental en la esfera de la edificación social-cultural la implantación de la enseñanza general obligatoria y gratuita, la educación politécnica en las escuelas, libres de toda enseñanza religiosa, la creación de una red de establecimientos prescolares (casas-cunas, jardines de la infancia). Con el fin de mejorar la educación social y emancipar a las mujeres, se estableció la enseñanza mixta de los niños de ambos sexos.
Los aportes de Stalin son marcados, desarrolla un papel preponderante, poniendo en práctica la concepción internacionalista; cumple la gran tarea de constituir la Unión de Repúblicas Soviéticas Socialistas (URSS), que en concreto es la aplicación de la línea del Partido respecto de las nacionalidades y los pueblos. Se convierte en una comunidad de naciones, nacionalidades y pueblos, regida por el socialismo, que en otras palabras será la defensa y desarrollo de las culturas nacionales, así como un avance en la educación, además, entre otros aspectos, se promueve la enseñanza en la lengua natural o propia de cada nacionalidad.
El Estado dirigió toda la enseñanza secundaria y la instrucción superior. En la URSS trabajaron 7.500.000 especialistas con instrucción superior, es decir, 39 veces más que en la Rusia capitalista anterior a la Revolución.
Al Estado le correspondía un notable papel, sobre todo en la dirección de la instrucción pública, la enseñanza en todos los niveles abarca en la URSS a más de 52 millones de personas, según el texto Fundamentos del Derecho Soviético.
Uno de los puntos principales de la Revolución de Octubre para la educación fue la DEMOCRATIZACIÓN, se logró por ejemplo a nivel primario y secundario la abolición de los exámenes, la co educación de los sexos, la educación fue libre, igual, obligatoria y universal, se inauguró la educación preescolar a gran escala, también se desarrolló la educación práctica y politécnica, con uso mínimo de los libros de texto, sin tareas en el hogar, sin exámenes o castigos. Se eliminó el analfabetismo y la educación dejó de ser clásica y religiosa y se basó principalmente en la ciencia.
Una de las expresiones de la democratización es la formación de los “Soviets Educativos” que eran elegidos por todos los residentes de una localidad y funcionaban en conjunto con los representantes electos de profesores, alumnos e intelectuales. Los estudiantes desde muy jóvenes encontraron la libertad para criticar a sus maestros y a los directivos de las escuelas. Se incentivó la libre organización estudiantil, al “autogobierno de los alumnos”, se organizaron los comités de clase y comités de escuela, que debatían en conjunto con los profesores y directivos los problemas sociales y los temas educativos.
En la educación superior se trabajó por formar a una intelectualidad proletaria que tenga la capacidad de darle continuidad a la dictadura del proletariado y además que pueda aportar con profesionales que sostengan el sistema socialista y que aporten en la continuación del mismo. En ese desarrollo se encontraron con grandes dificultades, primero el bajo nivel académico de los obreros y campesinos pobres que querían acceder a la educación superior para mejorar sus condiciones de vida, el partido abrió la nivelación para todos y todas, fue necesario la adopción de distintos mecanismos de nivelación para preparar académicamente a los trabajadores para la educación superior.
Se construyó las Facultades de los Trabajadores “Rabfacks” que nivelaba a los trabajadores para que adquieran las competencias académicas y técnicas para ingresar a las instituciones de educación superior, en el campo se formaron “Escuelas de la Juventud Campesina” para dar formación a la juventud de este sector con énfasis especial en las técnicas agrícolas de pequeña escala. Se priorizó el ingreso a las instituciones de educación superior a los hijos de los trabajadores, de los obreros y de los campesinos.
Una de las resoluciones del pleno del C.C. del Partido Bolchevique resume la visión de la revolución de octubre “el partido debe presentar especialistas proletarios rojos para reemplazar a los especialistas del medio social burgués que son ajenos a la construcción socialista. Ésa es una de las tarea básicas de la construcción económica y, a menos que sea lograda con éxito, la industrialización socialista no puede llevarse a cabo”. Tomada de la Revista Unidad y Lucha N.-34, La Revolución de Octubre y la Educación, Democracia Revolucionaria de la India.
Para cumplir con la gran demanda de trabajadores que requerían ingresar a la universidad se dio un salto radical en la construcción de nuevas instituciones de educación superior, se pasó de tener 152 en 1929 a tener 537 en 1930, para cubrir la demanda de más de 150.000 personas de origen obrero, estos elementos aportaron a crear una intelectualidad de la clase obrera y la creación de técnicos especialistas.
En definitiva, desde los inicios de la Revolución la política educativa se dirigió a educar a las grandes masas que hasta entonces no habían accedido a este derecho; con lo cual se demostraba la superioridad del modelo y sistema de educación socialista en relación con la capitalista, que reprime, minimiza y elitiza la educación, dejando fuera de las aulas a centenares de miles de jóvenes que no pueden acceder a la educación formal.
Un aspecto fundamental que queda como legado de Marx, Engels, Lenin, Stalin, de la Revolución de Octubre, de la construcción del Socialismo, es la moral comunista, la concepción de que los revolucionarios debemos pensar, actuar y vivir en base a nuestros principios.
La Revolución de Octubre irradió por el mundo, sus principios de una sociedad nueva, diferente, justa, los principios de la transformación del sistema capitalista y socialista, inspiró para que en algunos lugares se concretaran en acciones, en hechos, en luchas, en proclamas, las ideas revolucionarias.
Una de las principales luchas del movimiento estudiantil, especialmente universitario, se dio en Argentina en 1918, en la cual, los jóvenes inspirados en los ideales, de libertad, democracia y transformación, se tomaron varias universidades, en la exigencia de expulsar a la mayoría de autoridades que manejaban las universidades de manera antidemocrática, sin recoger la voz de los estudiantes. Esta lucha concluyó con el Manifiesto Liminar de Córdoba, cuya proclama contenía la autonomía, el cogobierno, el libre ingreso, la democracia, la gratuidad, como principios para el movimiento estudiantil a nivel continental. Está por cumplirse 100 años del Manifiesto de Córdoba, un año más tarde de la Revolución de Octubre, para los universitarios constituye un hito, un ejemplo, una guía que está vigente para llevar a la práctica esos principios.
La organización como tal, constituye otra importante lección del Partido para el triunfo de la gloriosa de 1917. A medida que la sociedad soviética va avanzando, crece el papel de la organización, comités y los sindicatos, cuya actividad en la solución de los problemas de la dirección de la producción se entrelaza más y más con la labor de los organismos económicos del Estado. En 1918 se creó la Unión de Juventudes Comunistas Leninistas de la URSS (Komsomol), que agrupó a más de 18 millones de jóvenes, fue una fuerza activa de la edificación del comunismo, gozaban del derecho de amplia iniciativa en la discusión y planteamientos ante los organismos correspondientes acerca de los problemas relacionados con el trabajo de las empresas, instituciones y centros docentes.
¡El ejemplo de la revolución de octubre sigue viva, los jóvenes luchadores, rebeldes, revolucionarios, recogemos con entusiasmo la semilla que dejo Marx, Engels Lenin, Stalin, con sus enseñanzas, triunfaremos!

LA UNIVERSIDAD ECUATORIANA.
La Revolución de Octubre contagió a varias luchas estudiantiles en todo el mundo. La propia organización y creación de la FEUE NACIONAL en 1942, surge como resultado de la lucha estudiantil en defensa de los postulados del Manifiesto de Córdoba, enfrentando a dictaduras militares que persiguieron y asesinaron a estudiantes, se crea con el ejemplo de la Revolución de Octubre, y con una concepción democrática, patriótica y revolucionaria.
El 29 de mayo de 1969 se dio una de las más brillantes páginas de la FEUE NACIONAL, que en conjunto con los secundarios creó un comité de bachilleres, con los que se impulsó la lucha por eliminar los selectivos y discriminatorios exámenes de ingreso en la universidad, por la democratización de la educación y la reforma universitaria.
La Masacre de la Casona Universitaria responsabilidad del gobierno de Velasco Ibarra, nos costó la vida de más de treinta jóvenes, prisión y tortura de 140 estudiantes. Gracias a esa gesta heroica inspirada en el Manifiesto de Córdova y en la Revolución de Octubre se eliminaron los exámenes de ingreso, permitiendo que el pueblo ecuatoriano tenga el derecho a la educación superior. Esta lucha permitió que en el país, se acabe con una educación que se manejaba con criterios feudales.
Las dictaduras militares, los gobiernos populistas, antidemocráticos, han agredido permanentemente a la universidad, han reprimido y clausurado varias veces la universidad ecuatoriana, por mantenerse permanentemente en defensa no solo de los derechos del estudiantado sino además en defensa de los intereses de la juventud, los trabajadores y los pueblos.
La consecuencia de las ideas y de las prácticas revolucionarias de nuestro Eterno Presidente de la FEUE, Milton Reyes, asesinado por oponerse a la dictadura velasquista que violentaba los derechos de los pueblos, por luchar en defensa de los derechos del movimiento estudiantil, es parte de la historia de la FEUE y de su fuente de inspiración, la Revolución de Octubre.
Los sectores democráticos, patrióticos y revolucionarios de la universidad ecuatoriana, hemos luchado permanentemente en defensa de los principios de Córdoba, de los principios de la Revolución de Octubre, siempre hemos sabido enfrentar las posiciones más retrasadas, atrasadas, de la burguesía, del imperialismo y del revisionismo en el Ecuador.
En esta lucha permanente de la universidad, la juventud y los sectores democráticos por una universidad vinculada al pueblo, con autonomía plena, científica y de calidad, tuvimos que enfrentar al gobierno de Correa.
El correismo trató de formar una universidad al margen de la sociedad, trasplantada con modelos del extranjero (Plan Bolonia, etc.), una universidad al margen de los problemas sociales. Implanto un régimen de educación superior sin autonomía y consecuencia de ello autoritario, ausente de democracia, sin vinculación a los sectores populares, ese enfrentamiento provoco expulsiones, prisiones de dirigentes estudiantiles.
Implementó una universidad antidemocrática, en la cual se dio paso a las designaciones para reemplazar a la elección de las autoridades académicas, impulsó las intervenciones a las universidades para intentar ponerlas al servicio del gobierno y de su partido político.
Utilizó el término “meritocracia” para justificar el carácter elitista de la educación que trajo como consecuencia que más de 600 mil jóvenes se queden al margen de la educación, jóvenes que no tuvieron oportunidad ni de estudiar ni de trabajar, además de la implementación de una serie de trabas para el ingreso y para el egreso de la universidad, en todo estos años no se amplió la infraestructura para atender a la demanda de la juventud.
Ideológicamente satanizó la educación pública tachándola de mediocre, de formar profesionales incapaces, de una universidad que se dedica a la politiquería y no a la academia, de ser una educación que no está acorde al desarrollo del siglo XXI.
Para legalizar estos aspectos por parte del gobierno de Correa se impuso la Ley Orgánica de Educación Superior LOES, que justificaba la eliminación y la reducción de los derechos del movimiento universitario. Toda esta concepción tuvo el propósito de silenciar la universidad ecuatoriana, de alguna manera este propósito tuvo avances pero no logró paralizar a la universidad, en estos momentos en conjunto con los sectores democráticos, tanto de profesores, trabajadores, politécnicos, pos gradistas, secundarios, etc. enfrentamos esta concepción y vamos hacia la construcción de una universidad deferente, de una universidad nueva, acorde a los derechos del movimiento universitario.

LOS RETOS ACTUALES.
La educación superior debe responder a las demandas de los hijos de los trabajadores, de los obreros, de los campesinos. El reto actual que tenemos desde la FEUE NACIONAL es cambiar la universidad actual por una universidad para el pueblo, una universidad democrática, científica y de calidad.
La formación de esta universidad para el pueblo la planteamos en el proyecto de Reforma a la LOES que presentamos en conjunto con los gremios de los docentes, los estudiantes secundarios, los trabajadores y empleados. Esta reforma recoge los criterios y los aportes del movimiento estudiantil de todos los sectores.
Buscamos recuperar la autonomía universitaria, que permita a la universidad desarrollarse bajo sus propios principios y no bajo sometimientos de entidades burocráticas. Que se recupere la autonomía académica, de investigación, financiera, para formar una universidad que se pronuncie sobre los problemas nacionales, sobre las demandas de los sectores sociales y populares.
Proponemos abrir las puertas de la universidad a la juventud, los trabajadores y los pueblos, que se eliminen todas las trabas burocráticas que impiden el acceso a la universidad, que además se financien la construcción de nuevas universidades, la apertura de sedes y extensiones que cubran la demanda de los pueblos.
El aumento del presupuesto para una educación de calidad, que se enfoque en el desarrollo de la investigación, de la ciencia y de la tecnología guiada en los principios de resolver los problemas nacionales y no en función del mercado o las grandes transnacionales.
Debemos recuperar la democracia al interior de la universidad, devolviendo la capacidad de elegir a nuestras autoridades académicas, es necesario eliminar las intervenciones del gobierno a las universidades, que los organismos de control del sistema de educación superior sean conformados por los actores de la universidad.
Esta reforma no tiene como fin la mera discusión en las altas esferas del parlamentarismo burgués, tiene como elemento central el objetivo de discutir con las masas estudiantiles para su esclarecimiento, pero además para aportar en elevar su conciencia y su estado de ánimo, haciéndolas protagonistas en la lucha por una Universidad para el pueblo.
Buscamos como FEUE NACIONAL que la universidad aporte en la acumulación de fuerzas para que con el ejemplo de la Revolución de Octubre podamos continuar aportando en el desarrollo de la revolución ecuatoriana desde la universidad.