miércoles, 26 de julio de 2017

Ponencia de la Juventud Revolucionaria del Ecuador al 21° Seminario Internacional Problemas de la revolución en América Latina

  

“Es la lucha final que comienza,
la revancha de los que ansían pan;
en la revolución que está en marcha
los obreros el triunfo alcanzarán”
Himno de la Joven Guardia

De seguro muchos de ustedes han leído o escuchado sobre el primer hombre que llegó al espacio,  su nombre fue Yuri Gagarin, nació en el pequeño pueblo de Klúshino, cerca de Gzhatsk, en la provincia de Smolensk, un 9 de marzo. Su madre fue campesina y su padre carpintero, su futuro respecto al de sus padres no hubiese sido muy distinto, habría trabajado en el campo, o a lo mejor en una fábrica con un salario miserable, hubiese sido padre a temprana edad porque en la época de su nacimiento no existían dispositivos anticonceptivos masivos, ni las mujeres podían decidir si querían o no tener hijos.  Para los jóvenes de origen obrero y campesino era imposible ingresar a la universidad o al ejército, esos espacios fueron exclusivos para los hijos de la burguesía o de la autocracia.

Pero, el triunfo de la revolución de octubre de 1917 generó condiciones de vida distintas para él, como para millones de hombres y mujeres de la gran Unión Soviética. Nació en 1934 y trabajó desde muy joven en la industria metalúrgica. En 1954 decidió inscribirse en el aeroclub de Sarátov, un año más tarde culminó sus estudios, ingresó a la escuela de pilotos de Oremburgo y el 12 de abril de 1961 fue la primera persona en viajar al espacio. La revolución bolchevique transformó el mundo y por supuesto la vida de Yuri, como la de millones de jóvenes, hombres y mujeres.  

La revolución bolchevique de 1917

No puede ser ubicada como un hecho aislado, único, sino como un proceso organizado de las masas que fueron influenciadas, concientizadas, dirigidas y organizadas por los bolcheviques, quienes bajo la dirección de Lenin, Stalin, Sverdlov, Molotov, Kalinin, Ordhonikse entre otros revolucionarios aplicaron los preceptos de la teoría construida por Carlos Marx y Federico Engels y los llevaron a la práctica,  conduciendo a los trabajadores, los pueblos y juventudes a la liberación del yugo zarista que los explotaba y oprimía.

La Rusia del siglo XIX e inicios del XX era el país más grande del planeta, sus territorios se extendían por Europa y hasta Asía. Pero,  a pesar de su extensión y riquezas era el más atrasado de esa región, de condición semifeudal, cuya producción fundamentalmente era agraria, se encontraba dominado por una autocracia y la iglesia ortodoxa que acumulaban riquezas, negaban libertades, derechos y básicas condiciones de vida digna para sus pueblos.

En estas condiciones se desarrolló un potente movimiento político revolucionario que emergió a finales del siglo XIX, que cuestionaba las condiciones de vida de los pueblos de Rusia pero que no comprendía todavía el camino certero para alcanzar el triunfo de la revolución social. Varias fuerzas políticas actuaron en ese escenario, en aquella época uno de las principales eran los denominados “populistas”, quienes tenían prestigio entre las masas por sus críticas al régimen, pero cuyas concepciones ideológicas eran esencialmente burguesas. Esos grupos debatían la necesidad de cambios en el gobierno o gobernante, no concebían la necesidad de la toma del poder. En cambio entre los obreros,  en los primeros sindicatos y entre los jóvenes estudiantes se discutía la necesidad de cambios profundos, estructurales.  Allí aparecieron los primeros grupos marxistas que plantearon la necesidad del poder y la construcción de una nueva sociedad. 

Ese escenario maduró y se produjeron tres revoluciones. “La democrático-burguesa de 1905, la revolución democrático burguesa de 1917 y la revolución socialista de 1917[1]” De estas, pero sobre todo  de la revolución socialista de octubre buscamos comprender y arrancar múltiples enseñanzas para que el camino de la revolución de los pueblos, trabajadores y jóvenes del Ecuador, América Latina y el mundo se acelere.

¿Quiénes protagonizaron la revolución?

El marxismo nos enseña “que las masas son las hacedoras de la historia”, las grandes transformaciones del mundo han tenido en todos sus sucesos la participación protagónica, voluntaria, consiente de millones de hombres y mujeres que se han opuesto a las condiciones de vida que imperan. Desde la revolución de Espartaco en el viejo imperio romano, hasta el último derrocamiento de gobierno burgués en el Ecuador en 2003, esos movimientos, revueltas y revoluciones han sido protagonizadas por las masas.

La revolución de octubre de 1917, fue también una obra de las masas obreras, campesinas, de las mujeres, de los jóvenes de Rusia. El protagonismo y la fuerza fundamental de aquel proceso estuvo entre los obreros, los sindicalistas. Particularmente entre los trabajadores de la fábrica, del ferrocarril, del telar, en cuya fuerza productiva se encontraba y encuentra el desarrollo y progreso de la sociedad.

La agitación política de los bolcheviques, su presencia permanente en los espacios organizativos de los trabajadores,  en su vida cotidiana, construyeron y calificaron la conciencia política de los obreros. Quienes progresivamente asumieron su rol, la necesidad de la toma del poder y su condición de sujeto protagónico de la revolución, de sepultureros de la burguesía.

Así lo demostró la historia y así los pueblos y los revolucionarios hemos comprendido el desarrollo de la revolución de octubre. Sin embargo uno de los actores poco referenciados en la etapa prerevolucionaria y durante el triunfo de la revolución,  es la juventud. Más sin embargo, esta tuvo un significativo accionar en todo su proceso, la juventud obrera, campesina, estudiantil fue protagonista de la revolución y posteriormente de la construcción del socialismo.

Los primeros grupos marxistas aparecieron a inicios del siglo XX entre los obreros, pero también en las universidades y colegios de Ninsk, Peterburgo y Moscú. En ambos espacios los más entusiastas y enérgicos activistas fueron los jóvenes, Lenin y Stalin fueron ejemplos de aquello.  

Lenin entró en contacto con las ideas marxistas a los 17 años. Tras la muerte de su hermano Alejandro quien se encontraba entre las ideas de la “voluntad del pueblo-anarquismo” y quien fue ejecutado por el intento de asesinato al ZAR II, frente su cuerpo, Lenin exclamo: “No, nosotros seguiremos otro camino. No es ese el camino a seguir…”[2]

En 1887 fue expulsado de la Universidad de Kazam por generar una revuelta estudiantil, en su detención un policía le dijo: “¿Para qué alborota joven, si ante usted se alza un muro? a lo que Lenin respondió: Un muro, sí, pero podrido, basta un empujón para que se derrumbe. El empujón lo daría con efectividad 30 años después.

Y ese curso revolucionario iniciado en la juventud fue ininterrumpido hasta la fecha de su muerte. Lenin inició su vida política de joven en los espacios estudiantiles, afirmó sus convicciones en el trabajo político junto a los obreros, y se consagró con el triunfo de la revolución como el dirigente máximo de ese proceso y del Partido Bolchevique hasta el día de su muerte.

Stalin ingresó a los 14 años al Seminario de Tiflis, en el que se vinculó al círculo marxista de obreros y estudiantes Massame Dassi (Tercer Grupo) nombre adoptado para diferenciarse de liberales y populistas. De aquel lugar fue expulsado a los 18 años por su accionar político y protagonismo en hechos ilegales contra el orden establecido, desde ese suceso y de forma ininterrumpida Stalin entregó su vida a la lucha por la revolución.  “Para 1904 y 1905, Koba (uno de los seudónimos con los que actuó Stalin, era para los mencheviques el hombre más odiado…, se convirtió en un dirigente reconocido...[3]

Fue el director del periódico Pravda-La verdad, defensor de las ideas marxistas y de los planteamiento de Lenin en el seno del Partido. “Según sus compañeros de entonces en él hay una cualidad primordial: su lenguaje sencillo, directo, comprensible para todos y con mayor razón para los obreros. En su boca el marxismo, ese socialismo científico aparece límpido, esboza ya el futuro…”[4]

Stalin fue sin duda un eje fundamental en el triunfo de la revolución. En los días previos al estallido insurreccional y al desenlace revolucionario. El 16 de octubre de 1917, Stalin es designado el responsable del comité insurreccional, organismo encargado de dirigir las operaciones militares para derrocar al Zar y tomar el poder para los soviets y bolcheviques.

A estos dos grandes hombres que iniciaron su vida política en la juventud los acompañaron miles más, que por su conciencia, audacia fuerza y vitalidad provocaron y protagonizaron las revoluciones de 1905, 1917 y la de octubre de 1917.

En las primeras filas de combate, entre las dirigencias de los soviets de Petrogrado y Moscú estuvieron siempre jóvenes. Jóvenes obreros, estudiantes que abrazaron el marxismo, lo defendieron y lo llevaron a la práctica con objetividad y sentido estratégico.  En las universidades y colegios estuvieron los bolcheviques que jalonaron a la juventud estudiosa para el trabajo revolucionario en la fábrica y el campo. La juventud actuó desde el inicio en la lucha por los cambios estructurales, los bolcheviques fueron la expresión joven y revolucionaria de la política que se opuso al pasado y que conquistó y construyó el mundo nuevo.  

¿Qué enseñanzas le entrega a la juventud y a los pueblos del mundo el triunfo de la revolución de octubre?


Para comprenderlas de mejor forma necesitamos ubicar este proceso como inédito para la humanidad, la revolución de 1917, es la primera revolución proletaria de la historia, como lo señala Lenin, abrió una nueva etapa en el curso de la humanidad, “la etapa de las revoluciones proletarias.”

Sin duda esta pudo tener errores y límites. Los pueblos, los trabajadores, las juventudes debemos partir de un punto,  sus realizaciones se emprendieron sin precedente alguno y además mirarlos en retrospectiva, 100 años antes.

La revolución de 1917 es entonces,  una respuesta histórica de la clase trabajadora frente a las condiciones de opresión y explotación de los zares y  la burguesía. La revolución de octubre afirmó el carácter de la clase trabajadora como fuerza trasformadora del capitalismo.

Esta respuesta práctica puso de manifiesto la validez del marxismo para construir la nueva sociedad y lo alimentó, desde entonces la teoría revolucionaria, el marxismo se  convirtió en marxismo leninismo.

La revolución de octubre dio resolución efectiva a las contradicciones fundamentales de la época. El triunfo de la revolución cambió radicalmente la sociedad, transformó las relaciones sociales de producción caracterizadas por la explotación. Los ideólogos de la burguesía en la actualidad afirman la superación de las formas de explotación debido a las innovaciones en la producción capitalista.  Sin embargo su evolución no puede radicar en los niveles o tiempos para producir las mercancías, sino en la transformación del carácter de las relaciones sociales productivas.  La revolución de octubre y la construcción del socialismo, en realidad las superaron,  transformaron su carácter explotador por cooperativo, eso lo hicieron estatizando y planificando toda la producción, así avanzaron en la satisfacción de las necesidades de las amplias masas, de las generadoras de la riqueza. Resolviendo así la contradicción fundamental de Capital-Trabajo.

La industrialización de la producción, la socialización del conocimiento y el desarrollo de la ciencia y la tecnología le brindaron a la URSS enormes índices de desarrollo y crecimiento en todas las áreas. Le permitieron romper las cadenas de dependencia imperialistas que le ataban a la Rusia zarista. El reconocimiento y la vinculación protagónica de las decenas de nacionalidades y centenares de pueblos, el carácter democrático en la construcción del URSS afirmaron el proyecto político de Estado Socialista, así la revolución y el socialismo resolvieron la contradicción nación dominante, nación dependiente.

Se afirmó la tesis de Lenin respecto a que la revolución triunfará en el eslabón más débil de la cadena de dominación capitalista-imperialista, allí donde las contradicciones capitalistas-imperialistas son más agudas y no necesariamente en las naciones de mayor nivel de industrialización y desarrollo como afirmaban determinados “marxistas”, menos aún que esta será simultánea y estallará en varios países o en una región a la vez, como lo afirmaban los trotskistas.

Los bolcheviques construyeron nuevas formas de organización, fueron revolucionarios en todo momento. Diseñaron y construyeron tácticas políticas que les permitieron acrecentar las fuerzas para el triunfo de la revolución. Así las tesis de abril planteadas por Lenin, para dar respuesta revolucionaria al gobierno transitorio que había sido implantado planteó como elemento central, “Todo el poder a los Soviets”, el 18 de junio de 1917 los bolcheviques convocaron a una movilización, en el Pravda se publicaba: ¡Abajo la guerra! ¡Abajo los ministros capitalistas! ¡Todo el poder a los soviets! Los Soviets eran un poder paralelo al de los Zares y en su momento el gobierno transitorio,  fueron el espacio de acción principal de los bolcheviques, lo que les permitió tomar su dirección.

De los soviets, de sus discusiones amplias, de su participación directa nació una nueva forma de democracia, la democracia obrera que con la dirección bolchevique estableció el rumbo de la revolución, planificación y construcción socialista que le entregaría a la URSS años más tarde los más altos niveles de desarrollo y progreso social jamás vistos.

La construcción de un partido de nuevo tipo, del Partido Comunista,  la definición del destacamento más alto de la clase obrera, de la organización de vanguardia que por su línea ideológica y política puede y condujo a las masas de Rusia al triunfo de la liberación. Ese partido de nuevo tipo, de carácter selecto y secreto, que utiliza todas las formas de lucha, que actúa sobre la legalidad e ilegalidad que es eminentemente conspirativo y es el generador de la conciencia política de las masas es uno de los aportes teóricos más importantes de la revolución de 1917.

¿Cuál fue el rol de la juventud posterior al triunfo de la revolución?

Uno de los sectores a los que los bolcheviques apelaron para su incorporación permanente fueron los jóvenes. Es así que en 1919 el Partido, constituyó el Komsomol, la Unión Comunista de la Juventud (Kommunisticheskiy Soyuz Molodyozhi).

El Komsomol fue el espacio de la formación de nuevos y jóvenes comunistas, allí se formaron los dirigentes del Partido que enfrentaron la construcción del socialismo, que crearon las primeras unidades de producción, que defendieron las realizaciones de la revolución. El Komsomol actuó de forma abierta y clandestina, tuvo un rol protagónico en la guerra civil de 1918 a 1921 y durante la II guerra mundial.

Hacía el XXV Congreso del Komsomol, Stalin afirmó: “El Komsomol ha ido siempre en las primeras filas de nuestros combatientes. No conozco un solo caso, en el que se quedase a la zaga de nuestra vida revolucionaria…” fue la joven guardia de la vanguardia política.

Los Komsomoles (jóvenes comunistas) hicieron suyo el sueño y la construcción del socialismo. La juventud es presente y futuro, es realidad y perspectiva de una nueva vida. Los Komsomoles, cumplieron la tarea encomendada por Lenin a los jóvenes comunistas: “Aprender”, pero su ingenio y compromiso no solo los llevo aprender, sino a enseñar, fueron protagonistas de la campaña de alfabetización en 1919. En 1918 en las puertas de los Komsomoles rezaba una consigna: El Comité del Komsomol está cerrado. Todos se han ido al frente, asistían a la guerra como soldados para defender la patria socialista, porque aquella construcción era suya, el mundo nuevo les pertenecía.

Ellos como parte de los bolcheviques nos entregaron un mundo sin guerra en la mayoría de los territorios del planeta, nos liberaron de las fauces del nazi-fascismo hittleriano, fueron los comunistas los que llegaron a Berlín y fue el Ejército Rojo compuesto de Komsomoles los que implantaron la bandera roja de la URSS en lo más alto para poner fin a la  II guerra mundial.

De ellos los jóvenes revolucionarios del mundo hemos tomado valiosas experiencias, en el Ecuador los militantes de la JRE abrazamos el ejemplo de rebeldía, el compromiso férreo de luchar por la revolución hasta su triunfo para defender sus realizaciones. Pero sobre todo abrazamos como el mérito más alto de un joven revolucionario ser militante del Partido Comunista Marxista Leninista.

¿Cuáles fueron algunas de las más importantes realizaciones de la URSS que beneficiaron a la juventud?

La mayoría de los derechos, libertades de la URSS se dieron por primera vez en la historia y marcaron el camino para varias de estas realizaciones en otros rincones del mundo.

Educación
Varios fueron los avances en este campo y señalaremos solo algunos: el socialismo de la URSS propuso, el cambió en el carácter de clase de la escuela, abriendo las puertas para que millones de hijos e hijas de trabajadores, campesinos tuvieran acceso a la escuela, colegio y universidad. (Debemos recordar que previo a la revolución, en la escuela solo se enseñaba, ruso, matemática y la biblia, además que las mujeres no tenían acceso a la educación secundaria, ni la universidad).

La revolución de octubre dio paso a la creación de los soviets educativos, espacios conformados por estudiantes, padres y docentes que definieron las políticas en cada escuela, se edificó un verdadero cogobierno educativo.  Aquí tuvieron gran fuerza los Komsomoles estudiantiles como órganos de vigilancia y cumplimiento de la política revolucionaria en la educación.

La educación en la URSS se desarrolló en las lenguas de cada uno de los pueblos lo que permitió recuperar más de 33 lenguas y construir sus formas de escritura especifica.

Para 1930, superada la primera guerra que enfrentó la URSS, por primera vez en la historia la educación fue gratuita y obligatoria para los niños de 7 años en adelante. Se estableció un sistema de 4 años de educación primaria, 3 años de educación media, se crearon universidades y escuelas politécnicas para el desarrollo de la ciencia, la tecnología y la formación de los profesionales que requería el socialismo.  Se definió como prioridad la educación para los obreros, se instituyeron los Rabfaks (Facultades de trabajadores), cursos habilitantes para el acceso a la educación superior, cuyo objetivo fue promover una intelectualidad de obreros para la patria de los trabajadores.

La educación fue concebida como un espacio integral que involucró, la filosofía, las ciencias, el arte, para la formación del hombre y mujer nuevos que demandaba aquella sociedad. Reconoció las libertades y derechos de todos, conjugó la educación con el trabajo e involucró a millones en el desarrollo del socialismo. Esa educación fue un espacio democrático y no de sometimiento, de inclusión y no de discriminación como ocurre en la actualidad en nuestro país, en el que cientos de miles de jóvenes no pueden ejercer su derecho de acceder a esta.


Trabajo:
El trabajo en la URSS fue de 8 horas, con dos meses de descanso. Los jóvenes podían acceder al trabajo desde los 16 años con acceso a salario básico y todas las prestaciones. Existían dos meses de vacaciones que eran a su vez subvencionadas por el Estado. 

Existieron diferencias salariales, sí,  pero estas no eran abismales como en la sociedad capitalista, el socialismo se guía sobre el principio de: “De cada quien según su trabajo y de cada cuál según su capacidad”, así entonces el trabajo en la URSS fue sinónimo de dignidad y desarrollo. Mientras el mundo enfrentaba la peor crisis de la historia en 1929, la URSS era el único país con índices de crecimiento positivo en su economía.

En particular la juventud comprendió que el trabajo era el motor de desarrollo de la nueva sociedad y se vincularon de forma entusiasta al conjunto de sus actividades, por ejemplo: En 1934, más de 350 mil jóvenes llegaron a  las tierras vírgenes de Kazajstán y Siberia. En poco tiempo se labraron 36 millones de Ha. de tierras, allí se crearon 425 sovjoses cerealistas. Tiempo después los komsomoles edificarían toda una ciudad que se demominó Komsomolsk, que fue uno de los principales centros industriales de la URSS.

Deporte
La URSS le dio importante espacio al deporte, lo concibió como una cultura física, en 1920 constituyó  el Comisariado Supremo de la Cultura Física. La manera de centralizar el deporte y organizarlo fueron las SSSR, las Sociedades deportivas voluntarias. Algo así como clubes o escuelas deportivas que agrupaban a todas las disciplinas y por las que pasaron millones de niños.
Los clubes de fútbol estaban ligados a esas Escuelas, a su vez auspiciadas por los grandes organismos estales: el Torpedo era el club de la fábrica de automóviles ZIL, el Lokomotiv, el de la red de ferrocarriles, el CSKA, el del ejército rojo, o el Zenit, el de los trabajadores de la industria armamentística. Esa concepción y política sobre el deporte le entregó victorias en múltiples disciplinas deportivas.
Derechos de los niños y las mujeres
En abril de 1918 se creó un código civil que eliminó el matrimonio infantil. Suprimió todas las potestades de los maridos sobre sus esposas; eliminó la compra venta de mujeres y reconoció a las mujeres como jefas de hogar; se abolió la condición de hijos ilegítimos y se reconoció para todos el derecho a tener un hogar, en el caso de los niños sin hogar, fueron hijos del Estado. En 1920 se reconoció por primera vez en el mundo el derecho al aborto gratuito y en condiciones de calidad; se garantizó el derecho a la maternidad por 3 años con prestaciones pagadas.
Se creó por primera vez en la historia guarderías infantiles, centros de reparación de ropa, lavanderías, avanzando así en la eliminación del trabajo doméstico y la división sexual del trabajo, asumiendo sus costos desde el Estado.

Ciencia
Muchos de los avances en la ciencia y la tecnología deben ser concebidos como resultados de lo realizado durante la etapa revolucionaria y aplicación de los preceptos marxista leninistas, que perduraron hasta la etapa del revisionismo. Asi la URSS lanzó el Sputnik en 1957 (primer satélite artificial de la historia, envío al primer ser vivo (Laika) al primer hombre y mujer (Yuri Gagarin, Valentina Tereshkova) al espacio. El desarrollo de la ciencia y la tecnología aceleraron la producción en favor de las masas trabajadoras, fue el primer país del mundo en superar las hambrunas. En 1932, el volumen de producción industrial de EEUU fue de 53.8%; el de la URSS 184,7%; y en 1933 EEUU 54,9%  y la URSS 201,6%.
Todos los elementos mencionados son parte de las realizaciones de la revolución, de la socialización de la producción y la riqueza. Son los ejemplos de la nueva vida que nos presentaron los bolcheviques.

Los jóvenes revolucionarios del Ecuador sostenemos a la revolución social del proletariado como una necesidad histórica que requiere ser concretada. Queremos ver y construir un mundo nuevo, recogemos las experiencias de los bolcheviques y nos decidimos a avanzar, la revolución en el Ecuador, en los pueblos de América Latina y el mundo será obra de las masas trabajadoras, de sus vanguardias políticas. La revolución y el socialismo son el futuro de la humanidad, alcanzarlo y construirlo requiere de nuestras manos, nuestro trabajo y nuestros sueños. Sumemos cada vez mayores y más calificados esfuerzos para “conquistar el cielo por asalto”.

“Si uno quiere ser un verdadero revolucionario
será joven hasta la muerte..” Kalinin


Secretariado Nacional Juventud Revolucionaria del Ecuador
Quito, julio de 2017.










[1] Historia del Partido Comunista de la URSS (Compendio), Moscú, 1938
[2] Esbozo biográfico de Lenin, Moscú, 1975
[3] Tomado de la Revista Unidad y Lucha N° 32, Stalin y la revolución, pág. 77. (Historia del P.C Comunista. Moscú, 1947)
[4] M. Hartman, (Stalin) 

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